La idealizada imagen de la sociedad sueca con la que habitualmente interpretamos a este país, que junto a sus vecinos nórdicos solemos considerar como un modelo a seguir, está muy lejos de reflejar su realidad cotidiana. “Suecia tiene muchas cosas maravillosas, pero también una cara oscura como es la violencia de género, no sólo física, sino también psicológica”, explica Carina Bergfeldt, la escritora de moda en Suecia y periodista estrella del diario Aftonbladet, el más vendido del país con aproximadamente 1.400.000 lectores diarios.
