“Uno de cada 700 nacimientos, por estadística, debería ser un niño Down. Sin embargo, estamos por debajo de 150, el índice más bajo del mundo”, lamenta Agustín Matía. Según esta proyección, el año pasado tendrían que haber nacido 571 Downs, pero hace años que en España no se alcanzan estas cifras.
Los españoles invirtieron el 34% de su sueldo, uno de cada tres euros, en el alquiler de vivienda en 2018, lo que supuso un crecimiento del 2,9% respecto a 2017. Madrileños y catalanes son los que más esfuerzo deben hacer y destinan la mitad de su sueldo al pago del alquiler.
Así lo ha dado a conocer hoy el Instituto Nacional de Estadística (INE), que cifra el número de nacimientos en 369.302, el nivel más bajo en 20 años. Hace apenas diez años, justo en el inicio de la crisis económica, se sobrepasaba el medio millón, pero desde entonces (con la excepción de 2014, cuando aumentaron los nacimientos) este dato no ha dejado de caer.
Maria José Olesti, de la asociación The Family Watch, que «los entornos familiares son la solución a muchos de los problemas que tiene hoy en día la sociedad y, por ello, hay que invitar a invertir en políticas que apoyen a la familia, en medidas concretas para prevenir la soledad, la violencia filio parental, la conciliación o prevenir adicciones tan de moda como las pantallas, apuestas on line, etc.».
El estudio aporta información sobre una inmensa mayoría de los países (en el mundo hay reconocidos 194), que se dividen entre los que no tienen ninguna protección para los padres, como Estados Unidos, India o Suiza, los que tienen permiso de paternidad, por ejemplo China, Kenia o Francia, y los que tienen permiso parental, entre ellos Japón, Alemania o Noruega.
Por esto han solicitado que se tomen las medidas oportunas y se analicen seriamente las consecuencias, positivas o negativas, de toda legislación que afecte a la familia.