¿Para qué tener hijos?

La pregunta por los hijos como posibilidad y no como obligación puede plantearse a lo largo de la vida de distintas maneras. Hace un siglo se consideraba que solo las personas amargadas, sin ganas de vivir, ni perspectivas de futuro, ni pareja, se planteaban esta cuestión.

“No soporto la soledad”

Es complicado establecer un perfil. Hablar de una ‘norma’. Porque Asturias tiene más de 12.000 plazas residenciales, según los datos del ‘Informe Envejecimiento en red’, y cada uno de esos números es una vida.

Madres: De solas por obligación a solas por elección

El papel que la mujer ha adquirido en la formación de la familia y cómo gestiona la maternidad ha evolucionado en las últimas décadas. A partir de 1981, con la aprobación del divorcio en España, comenzó a incrementarse el acceso a la monomarentalidad, antes muy residual y prácticamente reservada a las viudas empobrecidas o a las madres solteras y estigmatizadas durante el periodo franquista.

La demografía invisible

En 1980 el 92,8% de las mujeres en el momento de tener su primer hijo estaban ya casadas, en 2018 esa proporción había caído al 43,8%. Ahora, un buena parte de esas mujeres primerizas se casan antes de tener el segundo hijo. El tiempo transcurrido entre el primer parto y el matrimonio fue de algo más de tres años.

La pobreza contada en cuatro familias con niños

Un informe de Save the Children analiza las más de cinco millones de familias con niños en España y las divide en seis categorías. Solo dos de ellas se escapan de la vulnerabilidad, las clases media alta y la clase media, que es el grupo más numeroso, con cerca de cuatro millones de hogares.