Así lo pone de manifiesto un estudio elaborado por la Universidad de Oviedo y la Consejería de Educación de Asturias en el que se advierte que, aunque la implicación familiar en el proceso educativo es positiva para el alumnado, hay formas de involucrarse que pueden ser «perjudiciales». Se refiere, sin nombrarlos, a los padres helicóptero, como se conoce a esos progenitores que sobrevuelan constantemente sobre la vida de sus hijos tratando de tenerlo todo bajo su control.
Los alumnos que hacen los deberes con ayuda de sus padres sacan peores notas

Obtienen 20 puntos menos que los que realizan los trabajos de forma autónoma. El 86% de las madres y el 63% de los padres preguntan a sus hijos si tienen tareas para casa.
Fuente: Olga R. Sanmartin - El Mundo, 30 de abril de 2019.
Fuente: Olga R. Sanmartin - El Mundo, 30 de abril de 2019.