Pablo Pineda, afectado con síndrome de Down, es un claro ejemplo de lucha y constancia. Tiene 38 años y es una de esas personas que en su día dijeron síndrome de Down… ¡Y qué! Asegura que desde pequeño, como le ocurre a cualquier niño, quiso ser abogado, luego periodista… según veía las profesiones de sus familiares. Sin embargo, conoció a un catedrático que le comentó que eran profesiones muy competitivas y que como a él le gustaban mucho los niños le vendría mejor estudiar magisterio.
Donde la sociedad nos pone un no, nosotros ponemos un sí

Un joven de 38 años da testimonio de su experiencia como primer universitario europeo con esta discapacidad. [Foto: ABC]
Fuente: Laura Peraita - ABC, 20 de marzo 2013
Fuente: Laura Peraita - ABC, 20 de marzo 2013