Gritar a los adolescentes o utilizar un lenguaje agresivo para recriminarles su actitud puede ser tan perjudicial como pegarles. Es la conclusión de un estudio de investigadores de las universidades de Pittsburgh y de Michigan que se ha publicado en la revista Child Development. El estudio sostiene que los gritos no van a reducir o corregir los problemas de comportamiento sino que, al contrario, pueden agravarlos.
Según un estudio gritar a los adolescentes es tan perjudicial como pegarles

La investigación sostiene que la violencia verbal agrava los problemas de comportamiento.
Fuente: El Periódico de Aragón, 5 de septiembre 2013
Fuente: El Periódico de Aragón, 5 de septiembre 2013