Exagero poco, diciendo eso. Y aún me atrevo a añadir que, sin las familias, el Estado no existiría; las familias son su verdadero origen y cabe que sean víctimas propiciatorias del mismo Estado si este pierde el sentido metafísico de su existencia porque, si no se funda en ellas, arriesga su misma continuidad.
Familias, estados minúsculos

España tiene que labrar su futuro mejorando los viveros de su juventud.
Fuente: H. Gómez de las Roces - El Periódico, 12 de mayo 2013.
Fuente: H. Gómez de las Roces - El Periódico, 12 de mayo 2013.